jueves, 10 de septiembre de 2009

En el Teatro de los Sueños… “Octavarium”

De regreso a la esencia del metal progresivo, este álbum marca un recorrido por las ocho partes que cierran el círculo cósmico de la transgresión de las ideas, mueven todo el concepto progresivo hacia las esferas más altas de la concepción musical. No hay un término que defina esta inefable manera de percibir el estilo de la majestuosa producción que encanta desde el primer corte. Solo la altura y el preámbulo a la imaginación conllevan al seguidor a sostener un buen concepto del protagonismo que mantienen los músicos.

Es el octavo álbum en estudio de la banda que además coincide con el 20º aniversario de su formación. Fue lanzado el 7 de junio del 2005 y se grabó entre noviembre de 2004 y febrero de 2005, The hit Factor. Tiene una estructura "circular" y los temas están conectados de varias maneras entre sí. Inspirado por los movimientos dialécticos de la vida.

Este álbum de ocho temas tiene algunos que van en la vena del progresivo característico de la banda, como "Panic Attack", tiene otros épicos como "Sacrificed Sons", y otros melódicos como "The Answer Lies Within" y finalmente, "Octavarium", un tema de 24 minutos que pareciera ser un combinado de todos y que en su final pareciera volver al principio, haciendo alusión a la idea "we move in circles, this story ends where it began" (nos movemos en círculos, esta historia termina donde comenzó), planteada en sus letras y que se refuerza a través de la música ya que luego del último acorde de la canción se oye el comienzo de "The Root of All Evil". Esta última es un tema que continúa la suite sobre el alcoholismo (capítulos VI y VII) iniciadas con "The Glass Prison" y "This Dying Soul" en los dos últimos álbumes. Los teclados de Jordan Rudess vuelven a cobrar cierto protagonismo en este álbum.

Ésta última pista además nos lleva en un paseo de estilos por todas las grandes bandas de rock progresivo de la historia, pasando por los inconfundibles sonidos de guitarra de Pink Floyd en sus primeros acordes, los Genesis de Peter Gabriel en su mejor época, el Polymoog inconfundible Rick Wakeman en los mejores trabajos de Yes, reminiscencias de Emerson, Lake and Palmer.

Las canciones contenidas en el album son: "The Root of All Evil", VI. "Ready" - 5:18, VII. "Remove" 3:07, "The Answer Lies Within" 5:33, "These Walls" 7:36, "I Walk Beside You" 4:29, "Panic Attack!" 8:13, "Never Enough" 6:46, "Sacrificed Sons" 10:42, "Octavarium" 24:00, "Intro instrumental (00:00 - 3:47)", "Someone Like Him (3:48 - 8:45)", II. "Medicate (Awakening) (8:46 - 12:15)", III. "Full Circle (12:16 - 18:27)", IV. "Intervals (18:28 - 19:55)", V. "Razor's Edge (19:56 - 24:00)".

Como información adicional del disco, tiene la distinción de ser el último álbum grabado en The Hit Factory, en New York City. Después de que las sesiones de Dream Theater terminaron un viernes en la noche, las luces se apagaron, y las puertas del estudio se cerraron para siempre, terminando una era en la industria musical.
Aunque dentro de “Octavarium” existen muchas claves y códigos ocultos, tal vez lo más interesante se presenta en la canción que le da el nombre al disco. Esto ocurre entre los 18:41 y 19:48, donde se presenta la sección IV: "Intervals" en la que Mike Portnoy va nombrando el intervalo (Root, Second, Third hasta Octave) mientras James LaBrie explica el tema central de la canción correspondiente. En "Root" se explica "The Root of all Evil" mientras se reproduce de manera casi inaudible el coro de la misma (Take all of me...), luego se continua con "Second", en la que se explica "The Answer lies Within" mientras se reproduce el coro de ésta y así sucesivamente hasta llegar a "Octave" y se reproduce "Side effects appear..." ("Octavarium", 11:53).
"Octavarium" tiene 5 partes y termina con el sonido inicial de "The Root of all Evil" que a su vez son las partes 6 y 7 de la suite de Mike Portnoy acerca de los pasos de rehabilitación del alcoholismo. La canción "Panic Attack" está incluida como jugable en el videojuego Rock Band 2 y está situada en el último nivel del juego, junto con otras 6 ó 7 canciones, por lo que está considerada como una de las canciones más difíciles de superar para los jugadores.

Es un ejemplo de la atemporalidad de una obra que va persistir a través del tiempo, sin embargo el la esencia proporciona que los sueños se muevan en espiral como un portento de ilusiones que están por venir… "Dreamer"